ocaso de un amor

Ayer recibí un correo de Sakuno me felicito por haber llegado tan lejos y con eso se que ella me apoya aunque no esta a mi lado.

Mi hermano llego hace unos minutos, dice que tengo que ganar este partido pero obviamente eso es lo que haré no vine asta acá solo para pasear, vine a ganar y cumplir la promesa que le hice a Sakuno…

Momo me hablo hoy por la mañana, me platico como van las cosas en el club ahora que los Sempais se graduaron, la verdad no le puse mucha atención a momo si no mi atención se dirigió al ruido de fondo, a lo lejos una voz familiar se escuchaba me quede callado por un instante y Momo me grito por no hacerle caso lo peor fue que en vez de decir otra cosa lo único que salio de mi boca fue su nombre “Sakuno”, no hubiera dicho eso Momo me molesto todo lo que duro la conversación, des pues colgamos y me mando un mensaje con una foto de Sakuno.

Te mando esta foto para que no la extrañes tanto…. Jajá jajá

Claro yo estaba muy feliz de haber recibido aquella hermosa foto no he parado de verla, justo en estos momentos en los que tendría que poner mi mente en blanco estoy contemplando tan bella imagen.

- Toc toc-

- Joven Echizen ya es su turno

Por fin es mi turno- Si Gracias ya salgo- se que todos me apoyan, mis padres, Ryoga, mis amigos y sobretodo Sakuno. Vi por ultima vez la foto antes de tomar mi raqueta y salir a la cancha que me vería ser campeón, sin querer solté una pequeña risa que fue interrumpida por otra voz familiar pero que no era tan linda…

-¿ por que te ríes?, No seria mejor que primero ganaras el partido Ryoma.

-Lo se pero es un hecho que con el nivel que tengo, no perderé amenos que tu fueras mi contrincante…

-Si es verdad pero aun así no subestimes a tus oponentes.

-Entiendo, gracias… Papá…-me acomode la gorra y me puse la muñequera blanca que Sakuno me había regalado, después camine tranquilamente hacia la puerta y salí, deje atrás a mi padre que sonreía de la misma forma en que lo hacia cuando jugaba algún partido con migo o con Ryoga, no evite sentirme feliz alcé mi raqueta y lo mire de reojo… aquel viejo mal arreglado había desaparecido por completo y ahora estaba aquel gran tennista que tanto admiraba y deseaba derrotar.

- Gana Ryoma y podrás aspirar a lo que yo llegue ha ser.
Voltee a ver al final del túnel, la luz del sol me impedía ver mas aya , camine tranquilamente hasta el final, antes de salir cerré los ojos aclare mis pensamientos y acomode mi gorra, mire al frente y di el primer paso a mi victoria…

-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-

-¿Como se siente joven Echizen?
*¿ Pasado mañana será la final tiene alguna táctica?
-¿Cree lograr realizar el sueño de su padre?

Muchas preguntas bombardearon a Ryoma camino a los vestidores, el no contesto pregunta alguna siguió su camino pero justo antes de que entrara a el vestidor se detuvo volteo a la cámara, sonrío y después dijo “Esto va por ti Sakuno” los periodistas se volvieron locos, Ryoma volvió a sonreír y después entro al vestidor, una lluvia de flachasos y mas preguntas inundaron el pasillo, Ryoma no volvió a salir y la transmisión termino.

Al escuchar aquellas palabras, sentí como mi corazón comenzó a acelerarse, y como la sangre se me subió a la cabeza provocando un vergonzoso color rojo…mis ojos se llenaron rápidamente y una lagrima callo sobre mi mejilla seguida de una enorme sonrisa, no pasaron mas de dos minutos cuando el teléfono de mi casa estaba sonando…

Como lo esperaba Tomoka había visto la transmisión y estaba marcando para enterarse de lo que se había perdido, pero yo no pude contestar nada, estaba tan feliz e impresionada, así que pedí disculpas a mi alocada amiga y colgué.

Estaba en mi cuarto sentada en la alfombra viendo al techo no podía dejar de escuchar su voz.

-Toctoc- aquel sonido me desvío de mis pensamientos y mi abuela entro a mi cuarto con una sonrisa de oreja a oreja de sus labios salieron las palabras que jamás me imagine escuchar.

-Prepara tus cosas y duérmete, mañana nos vamos a EE.UU.

-queee- fue lo único que salio de mi boca, mi abuela sonrío de nuevo y hablo mientras sonreía.

-Rinko la mamà de Ryoma me mando boletos de avión y entradas para la final así que mañana a las cinco de la mañana saldrá nuestro vuelo, prepara tu maleta y descansa no quiero venir a despertarte como siempre, buenas noches Saku.

Mi abuela salio de mi habitación y yo no hallaba que hacer, me senté en mi cama mientras observaba mi habitación y trataba de asimilar la noticia, todo era perfecto lo vería antes de lo acordado y podría estar ahí apoyándolo, me di unas palmadas en la cara y comencé a guardar mis cosas en una maleta roja que guardaba bajo mi cama, ya eran las 9 de la noche y me metí a la ducha, después me puse mi pijama y me senté en la orilla de mi cama para cepillar mi cabello, mientras veía justo en la tercera repisa de mi librero, ahí en un libro de mi colección de William Shakespeare estaba mi tesoro, guardado celosamente entre las paginas de mi novela favorita, era un libro de color azul, con unos grabados dorados en el lomo y en la portada “Romeo y Julieta” con letras doradas.

Mi tesoro era una foto la única que tenia de él, aquella que nos tomaron por accidente en el restaurante de Kawamura-sempai, me pare para tomar la foto y después me acomode en mi cama la verdad no pude dormir nada solo dormite un poco hasta que mi abuela toco por la mañana y mis nervios estaban al tope.

Antes de salir de la casa mi abuela hizo una llamada, después salimos y un taxi nos estaba esperando pero dentro había una persona…

- Apúrate Sakuno, Nanako nos esta esperando ya súbete al taxi
Nanako se asomo por la ventana y me saludo con una sonrisa, era genial durante el camino al aeropuerto me l a pase platicando con Nanako al parecer Ryoma le había contado todo, así que me sentía bien platicando con ella.

Ya no puedo esperar, el momento en que lo podré ver y escuchar su voz otra vez…